La apertura de sucursales en Corea brinda a las empresas una valiosa oportunidad para establecer una presencia empresarial local sin la necesidad de una sede central. Este enfoque estratégico permite a las empresas proteger sus derechos, adherirse a la jurisdicción surcoreana y participar en el desarrollo de propiedades. Las tarifas de registro para una sucursal coreana dependen del capital social autorizado de la empresa matriz, siendo un mayor capital sinónimo de costos de registro más elevados.
Una sucursal en Corea opera de forma independiente, participando en actividades generadoras de ingresos sin una incorporación local, lo que la diferencia de la inversión extranjera directa. La amalgama de sedes centrales y sus sucursales extranjeras crea una entidad legal cohesionada con procesos de contabilidad y liquidación compartidos. A diferencia de las oficinas de enlace, a las sucursales no solo se les permite, sino que se les anima a llevar a cabo actividades de venta, funcionando como entidades legales autónomas responsables de sus propias deudas y responsabilidades. El proceso de formación de una sucursal es sencillo, con menos formalidades que las corporaciones locales y con menores tarifas de registro. Este enfoque es adecuado para un alcance de operaciones más enfocado, permitiendo a las empresas extranjeras hacer la transición sin problemas desde la formación de sucursales hasta una subsidiaria local si fuera necesario.
Se requiere la presentación de una notificación obligatoria para el establecimiento de una sucursal, dirigida a un banco de divisas extranjeras. Sin embargo, circunstancias específicas pueden requerir una notificación al Ministerio de Finanzas y Economía. Estas circunstancias abarcan actividades relacionadas con las finanzas más allá de la banca, así como esfuerzos en valores y seguros, actividades comerciales no autorizadas por las leyes coreanas y aquellas percibidas como comprometedoras para la moral y el orden público.
Al notificar al Banco de Divisas Extranjeras, los documentos esenciales a proporcionar incluyen una declaración documentada, los instrumentos de constitución de la sede central, un certificado que designe a un gerente de sucursal local, un poder notarial y una copia del certificado de registro de la empresa o licencia comercial.
A. Definiciones en la Ley Comercial: Según la Ley Comercial, las sucursales se reconocen como establecimientos comerciales, requiriendo registro cuando las empresas extranjeras participan en actividades comerciales dentro de Corea.
B. Proceso de Registro:
C. Documentación Necesaria:
En resumen, optar por el establecimiento de sucursales en Corea resulta ser un camino estratégico para las empresas que buscan ingresar al mercado sin la necesidad de una sede local. Este enfoque no solo garantiza el cumplimiento de la jurisdicción surcoreana y facilita el desarrollo de propiedades, sino que también introduce una perspectiva matizada, en la que las tarifas de registro dependen del capital social autorizado. Operando de forma independiente sin una incorporación local, las sucursales desempeñan un papel significativo en el ámbito de la inversión extranjera directa, formando una entidad legal cohesionada con procesos contables compartidos. A diferencia de las oficinas de enlace, a las sucursales no solo se les permite, sino que se les anima a participar en actividades de venta, subrayando su estatus como entidades autónomas responsables de emprendimientos financieros.
Para un apoyo integral durante todo el proceso de formación de sucursales, Pearson & Partners, una firma de consultoría especializada en expansión coreana, ofrece una amplia asistencia en áreas como la incorporación y la contabilidad fiscal. Nuestros servicios garantizan un establecimiento suave y exitoso de su empresa en Corea del Sur. Si necesita orientación experta sobre requisitos legales, cumplimiento normativo y toma de decisiones estratégicas, no dude en ponerse en contacto con nosotros.